Tiempos espirales

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Las experiencias subjetivas son íntimas sensaciones y percepciones que el terapeuta, apenas es el puente de ese punto de vista, mundo  ante el maremagnum del universo sensible de cada individuo. Rozamos sus mundos internos y escuchamos repeticiones de teorías del eterno retorno, déjá vu, tiempos paralelos, lineal o el tiempo en espiral… para paliar el dolor.

Nos sentimos más cómodas a las aperturas de tiempos vibracionales, abiertos sin necesidad de cierres y convivir con la más vida de otras dimensiones; al camino arduo con pasitos, zancadas o vuelos astrales.

En los abordajes terapéuticos nos servimos de técnicas y arte para restaurar y evitar sufrimientos crónicos y, es bien el dolor porque revitaliza al clarificar situaciones traumáticas en diferentes etapas del proceso de crecimiento…no se puede evitar el sufrimiento, el asunto son las respuestas y por qué les moviliza, qué tratan de decir, esos estímulos y cómo se procesa el tiempo en espiral, el autoanálisis.  Nada está concluído y casi todo, es un deslizar, como cuando escribimos el final y, sentimos que se reinicia la imposibilidad de halar palabras.

Con el tiempo lineal de inicio y cierre funcionamos en mundos básicos, pero, al nivel de mundos y comunidades espirales los modos de vida son distintos, con los cantos, sueños, mitos y poesía que nos llevan a puertas inesperadas con una imaginación creadora y capacidad resiliente de ser casi inmortales, de ser hijas e hijos de Pacha en sintonía con las hermanas estrellas, constelaciones zoomórficas que nos acarician.  Escuchar y percibir espirales en la vida psíquica ahuyenta cualquier verdad férrea, abre posibilidades compasivas, al sentir la vida, organismos latiendo  en continuos movientos nuevos, y, todo es nuevo, un eterno descubrir, memorias ancestrales, universo que nos alumbran en ‘’la noche mas oscura del alma’’ y, no es repetición del mismo hecho emotivo, porque somos distintos cada día, con estaciones habitades por voces múltiples.

Las crisis nos elevan y repotencian los tiempos en espiral de la psiquis, posibilita la paciencia, nuevos lenguajes, monólogos y así, el arte, la litertura posibilita ‘’sacar piedras’’ en compañía  en ‘’proceso de convertirse en persona’’.  La pandemia tumbó las barreras mentales y la insania nos galopa.

Se normalizan las ideas suicidas, una de las secuelas rudas de la pandemia y, el suicidio de Masada quedó en estos tiempos superado por las migraciones, países condenados a muerte lenta… la extinción nos resbala y el afecto humano quizás funcione entre conocidos y más terrible es que el desamor reina y comienza al no tener conexión consigo mismo.

Recuerdo, las cuevas de la Sierra del Perú al ver familias momificadas al no querer seguir esclavizadas por el imperio español y, vi sus rostros delicados, ropas de niños, comidas envueltas en llickas o mantas, chumpis y polleras…y hoy toda la tierra tiembla con la muerte migrante y, pienso que todo se restaura y la psiquis, mente, energía…se recuperan con rituales e instrumentos apropiados de guamani, apus, creencias, terapias en conexión con mundos internos y externos, renacimientos . Nada se cierra al sentir, sentirse al migrar por primera vez, se nace y se muere n veces, y miramos las almas en eterno tránsito, espirales de esperanza al caminar, nadar, volar; hay veces nos ‘’olvidamos’’ y fundamos tierras, simulamos amar…

Las invocaciones nos alimentan y el autocuidaddo en espirales eternas posibilitan recuperarse para luego, conectar cuerpo, energía y vivir el goce pleno al disfrute de toda vivencia y, eso es posible al recuperar tiempo espirales, al habitar el presente desde la mirada subjetiva, atenta a condicionamientos y discursos opresores.  Quizás compartir el dolor duela menos en familia ‘’siempre voy a estar cerquita de ti’’    Escritora Ana Anka