Por Bayardo Quinto Núñez
DON LABERINTO
Contrastes de aquí, ahí y allí.
Creí haberte visto, pero no te vi, aunque dudo, te vi, pero no te encontré, porque en los recovecos de la mente existe un laberinto de dioses. Exteriorizó el entorno. ¡Ay, dios mío!, refunfuñó el pasillo laberíntesco. Vete maldad fomentada, serás aplastada, inquirió la mente. Aunque es costumbre inveterada, que a la mismísima realidad no le incumbe, sólo ser sibilinamente proterva. Asi es el mundo, al revés y al derecho o viceversa. No te metas a ese laberinto, porque verán como fenecen, les expresó don laberinto.
NO SERÉ EGOISTA
Un día la realidad expresó a su misma realidad. Estás ahí y nunca te reportas, no seas egoístas o sos hipócrita. La realidad en su interior se respondió, de verdad ¿pero qué hago?. Tu sabes lo mejor, inquirió la madre realidad.
IGNARO
Ignorar, es ser ignaro, y muchos creen que es una bofetada, pues no, se equivocan porque ese (a) quedan como mal educados. El ignorado será ensalzado dice La Santa Escritura…!!! En consecuencia, él ó la que ignora, esa es su propia bofetada y suplicio. Es mucho mejor ser amigo de amigo, inquiría él ignaro a su alrededor.
*Del autor de estas obras letrísticas:
Bayardo Quinto Núñez, Abogado y Notario Público, Escritor, Pintor y Músico.
Email: tac_tictac@yahoo.com