Por Hector Garcia Santos
Cuando hablamos del Dr. Salvador Jorge Blanco siempre nos llega la idea del presidente de la República en el período 1982- 1986, sin embargo no sólo ocupó la presidencia sino que fue un político que se había formado durante muchos procesos políticos, electorales y eventos históricos, como fue durante el gobierno constitucional del coronel Francisco Alberto Caamaño Deño, siendo el procurador.
Fue senador durante el cuatrienio 1978- 1982, pero poniendo de un lado el éxito político del Dr.Jorge Blanco, fue un connotado escritor de libros de consultas para abogados, estudiantes, fiscales, jueces y como material universitario.
Jorge Blanco fue un hombre transparente, honorable, caballero y siempre que pudo aportar en el plano profesional, nunca dudó de poner sus conocimientos al servicio de los demás. Quizás muchos desconocen que el primero que propuso que se creara el Consejo Nacional de la Magistratura en el país fue el Salvador Jorge Blanco, para la década de los 80.
Sin embargo esto se produce en la crisis post electoral del año 1994, cuando se modifica la constitución y se introduce el CNM,la separación de las elecciones municipales, congresionales y presidenciales. También en este pacto se puso candado a la reelección indefinida.
Obras de Jorge Blanco.
Formularios en las vías de ejecución (1969)
Introducción al Derecho
Guerra, revolución y paz
La unidad de jurisdicción analizada en el ejercicio de la acción pública y la acción civil (1986)
Duarte, Espaillat y Hostos (1986)
Archipiélago de intereses (1986)
Batallas nacionales (1986)
Estamos antes uno de los abogados de más prestigio que vistió la toga y birrete, vamos a poner aparte cualquier parcialidad u objeción de carácter personal o político, JB vivió la época de grandes de la política contemporánea, Joaquín Balaguer, Juan Bosch, José F. Peña Gómez, Jacobo Majluta, entre otros.
Jorge Blanco jugó su rol en la vida, defendió su honor con su propia arma, la ley y los argumentos. Nunca se escudó de la enfermedad para escapar de alguna condena por lo que se le acusó, mejor aún se defendió como todo un grande del discurso legal, aunque ya sabía cuál iba hacer su destino, la condena .
Aquí todos sabemos que la sociedad dominicana jugó su papel aquel fatídico 1984, donde muchos perdieron la vida, pero también hay una culpa histórica de la oposición que fue la que trató provocar una guerra civil y buscar inestabilidad política, económica y social para buscar capital electoral y, el resultado ya todos los sabemos.
Ojalá algún día aquí también se le dé la connotación de Estado, de héroe de la revolución de 1965 y de un gran reformador del Estado dominicano como fue el Dr. Savador Jorge Blanco, porque si revisamos los casos de Cristobal Colón, Pedro Santana, Joaquín Balaguer. Entonces JB se merece aunque sea se designe una ciudad, avenida o edificio jurídico en su honor.